La categoría M1 del Club Los Espinillos es el nuevo campeón del Torneo Provincial de Rugby. En la final derrotaron 19 a 17 a Universitario de Concepción del Uruguay y sellaron el campeonato en el que además finalizaron invictos.
Una final no apta para cardíacos se vivió en la “Catedral del Rugby” en la que el “Rojo” pudo sobreponerse a las adversidades del juego y así lograr un nuevo torneo en las categorías juveniles. En este caso, la victoriosa fue la división M1 que ganó de arriba abajo el torneo apertura que organiza la Unión Entrerriana de Rugby.
Tras finalizar el partido, Walter Montiel head coach y entrenador de forwards, hizo un balance sobre el torneo y señaló que “es más que positivo ya que los objetivos planteados se fueron alcanzando en mayor o menor medida. El trabajo se coronó con un título, pero sin perder de foco que las categorías juveniles son formativas y nuestro último objetivo es formar grandes personas además de jugadores de rugby lo más completos posible”.
Además, destacó que “en lo deportivo puedo decir que el equipo tiene talento bastante bien distribuido en todas las líneas, tenemos forwards muy fuertes que se hacen notar en el contacto, como backs decisivos en los espacios abiertos. Sin dudas el gran fuerte de este equipo es lo humano, el grupo y el compromiso demostrado con el otro y con la gente que los apoya. Este equipo además de los 23 jugadores que integran la nómina oficial de un partido tiene por detrás una red de soporte que empieza en las familias, y ahí reside nuestra fortaleza sin duda alguna”.
Por su parte, Claudio Burgos quien cumple la función de asistente y entrenador de backs analizó el partido ante CUCU y dijo que se jugó como una verdadera final. “Entran a jugar los nervios, los miedos y el entorno se vuelve un factor muy influyente. A pesar de eso y de ir abajo en el marcador mucho tiempo, los chicos tuvieron carácter y trataron de jugar bien siempre. Lo supieron hacer y por eso hoy están festejando”, afirmó
Y manifestó que “estoy feliz por ustedes chicos, así como también lo estoy con los M2 porque laburamos todos juntos y cada uno ha aportado lo suyo para este logro. Quiero que disfruten de este momento y focalicen en seguir por el mismo camino para que estos días se repitan”.
A continuación, Montiel agregó que lo que más le apasiona de su trabajo es “el crecimiento de los chicos, sin dudas. Ver como con el pasar del tiempo empiezan a usar las herramientas que uno les plantea para resolver situaciones y partidos. Me tocó hacerme cargo de estas dos divisiones (M1-M2) medianamente conformadas, a las que yo creo que llegué para darles algunos retoques desde lo técnico y lo táctico, haciendo mucho hincapié en el entrenamiento físico y el entrenamiento silencioso, que son cuestiones que no se tienen mucho en cuenta en el rugby desarrollo y que son fundamentales para tener deportistas completos”.
“Soy un convencido de los procesos, y los procesos llevan tiempo. Este grupo que hoy me toca comandar tiene una historia un poco más larga, viene de varios años en los que Pablo Valiente, Andrés Piñol y Claudio Burgos le pusieron un montón de trabajo para llegar a conformarlo”, cerró. Y también, ambos entrenadores hicieron una valoración al trabajo del Preparador Físico, Carlos Díaz.
Por último, el head coach sostuvo que “cuando las cosas se hacen bien, tarde o temprano llegan los resultados. Pero no termina acá, no sirve de nada quedarse con lo conseguido cuando queda tanto por mejorar. Se cansaron de escucharme decirlo así que, una vez más no está mal: llevar la camiseta roja implica sacrificio y compromiso, por uno mismo y por el equipo, por la familia y por el club. Este es el camino”.