Cada 30 de Mayo es el Día de la Esclerosis Múltiple, una enfermedad que afecta el sistema inmunológico y el sistema nervioso. Desde la Asociación de Lucha contra la Esclerósis Múltiple (ALCEM) se convocó a iluminar de naranja los edificios públicos de toda Latinoamérica. El Palacio Municipal está en las noches de este sábado y domingo, iluminadas de naranja sumándose a la iniciativa internacional con el fin de generar conciencia.
Bajo el lema #iluminEMosLatinoamerica diferentes organizaciones de más de 15 países de América Latina participan de esta campaña de concientización, que en Argentina es coordinada por ALCEM. El intendente Alfredo Francolini resolvió apoyar la iniciativa y el equipo de la Dirección de Electrotécnia del municipio procedió a iluminar del color distintivo, naranja, el Palacio Municipal.
Además, se convoca a subir a las redes sociales fotos utilizando ropa de color naranja con el hashtag distintivo, como así también visitar la página web www.alcem.org.ar
¿QUÉ ES LA ESCLEROSIS MÚLTIPLE (EM)?
La Esclerosis Múltiple (EM) es una enfermedad neurológica crónica, de causa no determinada, que afecta al sistema nervioso central. La EM resulta del daño a la mielina, la capa protectora de las fibras nerviosas del Sistema Nervioso Central que incluye al cerebro, la médula espinal y los nervios ópticos. La EM tiene una base inmunológica: el sistema inmune, normalmente encargado de defendernos de agresiones externas como infecciones, no reconoce a la mielina como propia y en consecuencia la lesiona. Si la mielina se destruye, la habilidad de los nervios para conducir impulsos eléctricos desde y hacia el cerebro se interrumpe y esto produce la aparición de síntomas. Los procesos de desmielinización y cicatrización aparecen en diferentes momentos y en diferentes zonas. De allí el nombre de esclerosis múltiple.
La causa de la EM permanece desconocida hasta hoy. No obstante, se reconoce la existencia de factores genéticos, que si bien no son absolutamente determinantes, generan una predisposición a padecer la enfermedad. Sobre esta predisposición genética, uno o más factores ambientales podrían influir en el desarrollo de la EM.
Aunque no modifica esencialmente la expectativa de vida de las personas que la padecen, la EM constituye una de las afecciones neurológicas más discapacitantes en el adulto joven, lo que implica un serio impacto en el ámbito familiar, social y económico laboral.