Este 1 de abril se celebra en Argentina el Día Nacional del Donante de Médula Ósea. En 2024 se cumplen 21 años desde la creación del Registro Voluntario Nacional, lo que permitió que más de 1.500 personas puedan acceder al trasplante a través de un donante no emparentado.
Para donar médula ósea en nuestro país hay que extraerse sangre y anotarse en el Registro Nacional de Donantes Voluntarios de Células Progenitoras Hematopoyéticas (CPH). En Entre Ríos los centros habilitados para inscribir se encuentran en los Bancos de Sangre de los hospitales San Martín y San Roque de Paraná; Delicia Concepción Masvernat de Concordia; Centenario de Gualeguaychú; Justo José de Urquiza de Concepción del Uruguay; y en el Sanatorio Adventista del Plata, ubicado en Villa Libertador San Martín (departamento Diamante).
Cabe mencionar que tres de cada cuatro pacientes no cuentan con un donante compatible en su familia, por lo que deben recurrir a alguien que no esté emparentado. En tal sentido, este Registro regulado por el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), es primordial para que toda persona que requiera un trasplante pueda ser tratado sin necesidad de viajar al exterior.
Fue creado en 2003 por la Ley 25.392 y permitió incrementar cada año la lista de argentinos que se suman a la Red Mundial de Donantes Voluntarios. De esta manera, el sistema de salud garantiza que a nivel nacional, el registro forme parte de la Red Internacional World Marrow Donor Association (WMDA), que actualmente cuenta con casi 40 millones de personas anotadas en los distintos países.
¿Quién puede inscribirse como donante?
Todas las personas de 18 a 40 años que gocen de buena salud, pesen más de 50 kilos y no tengan antecedentes de enfermedades cardíacas, hepáticas o infectocontagiosas.
Para inscribirse es necesario donar sangre en alguno de los centros de donación habilitados en los Servicios de Hemoterapia de los hospitales y Bancos de todo el país; y también pueden hacerlo en las colectas externas.