El primer ministro de Israel se refirió a los ataques del grupo terrorista Hamás y dijo que «es peor que ISIS y que deberían ser tratados de esa manera».
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró: «No vamos a negociar con terroristas», tras la toma de rehenes por parte del grupo terrorista Hamás de civiles israelíes.
En un mensaje grabado, el primer ministro sostuvo: «Israel está en guerra, nosotros no queríamos esta guerra. Nos forzaron a esta guerra de la forma más brutal y salvaje. Pero aunque Israel no empezó esta guerra, Israel la terminará».
Apuntó contra Hamas y expresó: «Hamás va a enteder que al atacacarnos cometió un error de proporciones históricas. Pagarán un precio que ellos y los otros enemigos de Israel recordarán por décadas», advirtió.
En el mismo sentido, Netanyahu cerró: «Al pelear contra Hamás, Israel no está sólo luchando por su propio pueblo, es una lucha por todos los países que se quieren oponer a la barbarie. Israel va a ganar esta guerra y cuando Israel gane, todo el mundo civilizado ganará», concluyó.
Netanyahu agradeció el apoyo de Estados Unidos
En su cuenta de X (ex Twitter), confirmó además que habló con el presidente de Estaodos Unidos, Joe Biden, y señaló que «Hamás es peor que ISIS y que deberían ser tratados de esa manera». Sostuvo que el Biden «apoya a Israel y apoya plenamente su derecho a defenderse» y le agradeció «su apoyo incondicional».
Por otro lado, dijo: «Dejé claro que sería necesaria una campaña prolongada y poderosa en la que Israel ganaría».
En su posteo, el primer ministro detalló el mensaje que le envió a Biden: «‘El sábado fuimos atacados con tal barbarie que no se había visto desde el Holocausto. Cientos de personas fueron masacradas, familias enteras fueron asesinadas en sus camas y hogares, mujeres fueron brutalmente violadas y asesinadas, más de un centenar fueron secuestrados, incluidos niños.
Desde nuestra última conversación, la escala de este mal no ha hecho más que crecer. Forzaron a decenas de niños, los quemaron y ejecutaron. Cortaron las cabezas de los soldados, asesinaron a los jóvenes que celebraban una fiesta en la naturaleza, los rodearon con jeeps y los dispararon en un agujero en el suelo, como en Babi-Yar, y confesaron el asesinato.
No hemos visto semejante barbarie en toda la historia del Estado de Israel. Son incluso peores que Madash y así es como debemos tratarlos»‘.