El pasado martes 4 de junio se realizaron en Concordia un total de doce allanamientos, en el marco de una causa que permitió desarticular una red de narcotráfico. En el marco de la misma investigación llevada adelante por la Dirección de Toxicología de la policía de Entre Ríos también se desplegó un operativo de once procedimientos en Villaguay, uno en la Unidad Penal de Concepción del Uruguay y dos en la cárcel de Gualeguaychú.
Los operativos se desarrollaron a raíz de una investigación iniciada hace más de cinco meses por la División Toxicología de Villaguay, la cual con la colaboración de la División Toxicología de Concordia y de la Dirección de Toxicología, pudieron determinar la comercialización de sustancias estupefacientes en distintos puntos de la ciudad de Villaguay que eran coordinados y dirigidos por un interno de la Unidad Penal N° 4 de Concepción del Uruguay, quien se encuentra condenado por narcotráfico.
El trabajo llevado adelante en la pesquisa pudo determinar que uno de sus proveedores era de Concordia, más precisamente en la zona de los piletones del barrio La Bianca. Se trata de Maximiliano Daniel Benítez, cuyos progenitores – Liliana Ramírez y Marcos Benítez – se encuentran alojados en la Unidad Penal N° 9 de Gualeguaychú, desde donde coordinaban las maniobras y movimientos de la banda con su hijo.
Maximiliano Daniel Benítez cayó detenido cuando iba a bordo de un Volkswagen Gol Country, en el puesto camionero de la Autovía Gervasio Artigas y la ruta 22. Al momento de ser aprehendido, Benítez estaba viajando hacia Gualeguaychú con un ramo de flores a buscar a su madre, quien ese día terminaba de cumplir una condena unificada por comercialización de estupefacientes y por narcotráfico.
La investigación indicaba que Maximiliano Daniel Benítez recibías las directivas de sus progenitores, para suministrar diversos kioscos de venta de droga en distintas partes de Concordia. La distribución no la hacía solo, sino que era acompañado por un trabajador del IOSPER, identificado como Andrés Ramírez – alias “El Grillo” –.
En lo que respecta a Liliana Ramírez y Marcos Benítez ambos están alojados en el penal del Gualeguaychú condenados por conformar una banda narco que operaba en Paraguay y distribuía droga en Entre Ríos.
Ambos cayeron detenidos en junio del 2019 tras un allanamiento de la Gendarmería en el marco de una causa llevada adelante por el Juzgado Federal de Concepción del Uruguay, en el que logró desbaratar la organización narcocriminal.
Dos años fueron condenados en un juicio abreviado. Benítez recibió seis años de prisión efectiva, mientras que Ramírez firmó por tres años condicional aunque esa no fue su última condena en una causa vinculada por la venta de estupefacientes.
En diciembre del 2021 volvió a ser detenida en el marco de una causa por narcomenudeo y luego cayó en junio del 2022, cuando en una investigación por abuso de armas encontraron 16 kilos en su vivienda de calle Chubut y Rivadavia, en la zona de los piletones.