El organismo impositivo impone ciertas restricciones a la hora de realizar transacciones con las cuentas bancarias. Una de ellas, es el tope cuantitativo que puede destinare a otro usuario.
Un informe especifica cuáles son los montos extremos para realizar transferencias bancarias, uno de los límites vigentes impuestos por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Es que, a pesar de su utilidad por la facilidad de realizar transacciones sin necesidad de disponer de dinero en efectivo, el escrito detalla ciertas consignas que son claves para estas operaciones.
Así, el monto máximo para realizar para poder realizar una transferencia bancaria sin pagar impuestos es de $125.000 en cajeros automáticos, y de $250.000 mediante el home banking.
Sin embargo, ante una pregunta habitual que según el informe realizan los usuarios, se aclara que los bancos no cobran nada por este tipo de operaciones, sin importar el monto. Es que se suele pensar que un porcentaje, queda para la entidades.
Los límites, igualmente, varían según la moneda o el tipo de cambio. Eso se vincula a los límites que se aplican sobre las transferencias para regularlas.
De cuánto es el límite en otras monedas
Así, lo máximo que se puede transferir sin pagar impuestos en dólares son u$s5.000, misma cantidad que para los euros. Esto, si se realizan por cajeros automáticos.
Si es por home banking, el máximo es de u$s12.000, también la misma cantidad que en euros, que es de €12.000, reveló lo escrito por el Banco Francés.
Además, se hace hincapié en que «la AFIP es la encargada de administrar y recaudar los impuestos internos, y de seguridad social en Argentina».
Esto, además de se «encarga de controlar ciertas operaciones financieras», como es el ejemplo de las transferencias bancarias a las cuales les pone precio.
El objetivo de esta medida es evitar delitos y riesgos como el lavado de dinero o los fraudes. Con el control adecuado, son cosas que pueden eludirse, detectarse y/o sancionarse.
A partir de cuándo dejará de existir la AFIP
El vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció este lunes en una conferencia de prensa la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y se creará la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA).
El Gobierno tomó la decisión en el marco de la reducción del Estado y la eliminación de «estructuras ineficientes», por un organismo de estructura más simple, más eficiente y menos costosa y burocrática.
La medida reducirá en un 45% las autoridades superiores y en un 31% los niveles inferiores, al mismo tiempo que se procederá a la desvinculación de 3.155 agentes que ingresaron de manera irregular al organismo durante el último gobierno kirchnerista, lo que representa al 15% del personal actual.
El Gobierno anunció que esta medida generará un ahorro anual de $6.400 millones. La desvinculación de más de 3.000 agentes es «un paso imprescindible para desmantelar la burocracia innecesaria que ha obstaculizado la libertad económica y comercial de los argentinos», según afirmó Adorni.