El piloto oficial de Chevrolet mostro un gran potencial el fin de semana en su debut con el equipo JP Carreras, pero a pocas vueltas del final y tras un cuarto relanzamiento de una muy accidentada carrera, sufrió un impactante accidente que lo dejo fuera de competencia. Tras conocerse su buen estado de salud, horas más tarde hizo uso de sus redes sociales para dar su parecer respecto de lo sucedido.
Quiero aprovechar las redes sociales para aclarar y contarles lo que pasó el Domingo pasado.
Primero para mí era un día especial, porque dejar mi Equipo fue muy difícil, mucho más de lo que se imaginan y además recibí muchas críticas hasta de mi círculo íntimo, de por qué tomaba esa decisión, pero yo solo era el que sabía lo que estaba sufriendo y viviendo.
Ir al equipo de Gustavo Lema con quién siempre tuve una excelente relación a pesar del paso de los años y la competencia, fue para mí siempre la mejor resolución para mí futuro profesional en el TC sin mi Viejo, pero veía que de afuera se miraba distinto y sinceramente, hasta empecé a dudar en un momento, pero no dejé de confiar en mis sentimiento de que era lo correcto y en Gustavo, a quien estoy muy agradecido porque todo superó hasta mis mejores expectativas.
Por lo tanto, no era una victoria más la que venía consiguiendo en mi primera carrera con el JP.
Sumado a esto, la Fecha de la Carrera, 13 de Febrero, fue el último día que escuche la voz de mi Papá, ya muy decaída por el tratamiento que estaba sufriendo. Fue muy duro, él la estaba pasando muy mal y no se imaginan lo que viví, mientras tanto yo en el autódromo con la Clasificación de la anteultima fecha del SúperTC2000 sin poder hacer nada… Una pesadilla.
Por eso, las emociones me invadieron y cuando faltaban pocas vueltas y todo parecía encaminado a ganar, decidí con lágrimas en los ojos decirle a Guille Ortelli que iba a cambiar la estrategia que habíamos acordado y poner todo, el 110%, para ganar con diferencia gracias al gran auto que tenía, en memoria de mi Viejo. No sé si estuvo bien o mal, pero estaba tan emocionado y con él presente, que fue lo que me nació hacer.
Luego vino el bendito Pace Car por 4ta vez… sumado a que la batería estaba dando una alarma y los relojes digitales fallando por bajo voltaje, todo se complicó de repente.
Me concentré al máximo porque sabía que Jhonito estaba con mucha actitud de ganar, lo había podido aguantar una vez, sentía que podía hacerlo de nuevo.
Relanzamos, Jhonito en una gran maniobra me logra emparejar y se tira muy agresivo por fuera. Yo intento soportarlo por dentro, siempre con control de la situación, intentando mantener una buena velocidad y al momento de rozarnos, tengo la mala fortuna que se enganchan las ruedas delanteras y el volante se me va de las manos, me voy encima de él y salimos los 2 hacia afuera.
Hasta ahí era una situación normal de 2 pilotos intentando ganar una carrera con estos autos, donde el contacto goma con goma produce estas cosas.
El problema vino después, mi dirección se rompió y SE TRABÓ. No podía mover el volante (pueden verlo en la cámara a bordo). Entonces al no poder tener el mando y el volante quedar trabado hacia la derecha, mi auto entró en trompo.
Apreté el freno usando la técnica de acelerar y frenar al mismo tiempo para enderezarlo. Estaba funcionando, lo venía logrando controlar (pueden ver la bloqueada de mi rueda delantera derecha justo antes que me impacte Christian) y en ese momento me pega de atrás intentando esquivarme.
Por suerte solté el freno porque si seguía frenando quedaba cruzado de manera lateral, el auto giró y miré deseando que todos me esquiven. Yo solo tenía control de los pedales, la dirección estaba totalmente trabada y no podía maniobrar el auto desde el momento del roce con Jhonito.
Lamentablemente el Pinchito no puede esquivarme, pero gracias a sus reflejos logró mover el auto, pegarme adelante y no en la puerta. De ahí en adelante todo lo que ya vieron y saben.
Hoy estoy bien, me hice estudios, no tengo nada roto, solamente los pies un poco doloridos, con moretones que ya van aflojando.
Gracias a la seguridad de los autos solo fueron golpes, algo para destacar y agradecer a la categoría por su constante trabajo en materia de seguridad que obviamente nunca será suficiente, siempre va a ser un deporte de riesgo y es parte del encanto de nuestro amado automovilismo.
Por último, quiero destacar a Christian y el Pinchito que enseguida se acercaron para ver cómo estaba y ayudar en lo que podían. Perdón por arruinar sus carreras a ellos y a los demás que se perjudicaron en el accidente, no pude hacer nada cuando se rompió la dirección y lamento enormemente lo que pasó. Gracias a Dios, nadie salió lastimado. Los fierros se arreglan.
Lo mismo a Rodolfo Balinotti y todo el cuerpo médico de la ACTC, llegaron enseguida además de estar en todo momento pendiente de mi evolución.
Felicito a Jhonito por su merecida victoria, se manejó todo y se la merece. Hablé con él y se preocupó desde el mismo Domingo de cómo estaba.
Gracias a los que se preocuparon, desde Balcarce 2011 no tenía un accidente así. Volveremos más fuertes.